7 años de Ida

Evolucionar o morir: ¿Cómo enfrentamos el cambio?

Una cosa que no te dicen cuando decides iniciar una empresa es cómo afrontar los cambios en los equipos. ¿Cuál es la mejor manera de crecer cuando tienes más proyectos? ¿Cuál es la peor manera de “achicarse”? ¿Cuánto se puede mantener una empresa con un equipo grande?

Revisando el último año y sabiendo que algunas buenas empresas han cerrado, no puedo evitar pensar en lo que hemos vivido en Ida. Ha sido un año de cambios, muchos cambios, que se fueron dando de manera planificada y otros de forma espontánea.

Y esto nos han desafiado a pensar en la empresa que fuimos, la que somos y la que queremos ser.

Comenzamos un año un poco tristes porque muy buenos compañeros ya no trabajan con nosotros. Si bien eso nos ponía en un escenario un tanto complejo, no tuvimos mucho tiempo para sentirnos mal. Empezaron a llegar nuevos proyectos y debimos rearmarnos rápido y definir bien cuál era nuestro foco de servicios.

Los nuevos clientes inyectaron el vértigo de todo proceso que comienza. Ocho meses después, hemos optado por una nueva forma de hacer las cosas.

Cambios que traen nueva energía

Iniciamos una nueva etapa en la que la manera de enfrentar los proyectos cambió. Hoy estamos trabajando con clientes grandes y pequeños, en proyectos a corto y largo plazo. Esta variabilidad nos enseñó que debemos ser capaces de trabajar de forma estratégica.

Tenemos el desafío de pensar en soluciones escalables, que permitan que la experiencia de usuario en esos proyectos sea elástica y pueda satisfacer a todas las personas que utilicen ese servicio digital.

Actualmente, estamos en un proyecto relevante para nosotros no sólo porque es un “cliente grande”, sino porque el impacto de nuestro trabajo alcanza a gran parte de los chilenos. Eso nos desafía a ser aún más rigurosos en la búsqueda de la mejor solución para nuestro cliente y sus usuarios.

Además, estamos trabajando con empresas del sector financiero, en educación, en un medio de comunicación, en instituciones públicas, en industrias. Todos proyectos muy distintos entre sí, que nos han instado a ser más versátiles.

No es fácil plantear proyectos más integrales, o que se paren desde el diseño de servicios -una experiencia nueva para nosotros-. Tampoco es sencillo abordar iniciativas más específicas, como una consultoría en la estrategia de diseño de una aplicación o en la implementación de un modelo de marketing digital.

Sin embargo, a pesar de lo distintos que son nuestros clientes hoy, sabemos que confían en que podemos ayudarlos a mejorar en la manera en que entregan sus servicios a usuarios y clientes.

Un grupo que nace

También estamos trabajando con pequeñas empresas y negocios de nicho que nos ha puesto en un escenario donde la experiencia también está mediada por un factor humano relevante.

Ahí, los procesos tienen que ser más eficientes y fáciles de implementar, con herramientas ágiles que nos permitan acortar procesos de estudio y entregar soluciones de nicho a personas que, como negocio, no necesariamente tienen la UX como eje.

Ahí también hemos aprendido: a ser menos complejos, a explicarnos con más claridad y a tener la capacidad de crear soluciones pequeñas, pero que para nuestros clientes “chicos” son de gran impacto.

Como sabemos que nuestra experiencia es el mejor capital que tenemos, nos hemos concentrado en la consolidación de Ida como un proveedor de conocimientos a través del modelo {ida workshop – nuestro motivo de celebración el 2016-.

Hemos hecho workshops abiertos, para equipos UX en empresas, para grupos de periodistas en medios de comunicación, e incluso para estudiantes. Así, vamos enseñando a distintos perfiles profesionales cómo trabajamos en crear experiencia de usuario.

Estos “nuevos negocios” nos motivaron a formar Lúdica Digital que se concentrará en el marketing digital y la capacitación, y Renex, que entregará soluciones digitales de alto estándar a proyectos emergentes.

Ahora conformamos un grupo de empresas en las que Ideas Digitales Aplicadas seguirá entregando servicios a grandes y medianas empresas, con enfoques en trabajo exclusivo y de largo plazo. Renex y Lúdica Digital se concentrarán en nuevos negocios y emprendimientos pequeños.

La asociatividad como atributo

Nos llena de satisfacción darnos cuenta que tenemos fuertes lazos con personas que nos acompañan por años y que han crecido con nosotros. Nos gusta pensar que el núcleo se amplía de forma selectiva pero sólida

Las caras nuevas en el equipo trajeron un aire de renovación que cuestiona los paradigmas que teníamos. Hemos evolucionado hacia nuevas lógicas con nuevos ímpetus, apostando a un trabajo multidisciplinario, en el que todos podemos aprender.

En la consolidación de este nuevo modelo, elástico y adaptable, también participa un grupo de colaboradores externos. Los conocemos hace muchos años. Entre ellos y nosotros existe la confianza forjada en el tiempo. Y eso, a su vez, genera una sinergia y asociatividad sana para empresas como la nuestra.

En este proceso, la mutación y evolución no solo beneficia a IDA. Sabemos que los actuales desafíos nos darán grandes satisfacciones en áreas diversas.

Es interesante ver como cada nuevo aniversario nos sorprende haciendo cosas nuevas. Es gratificante sentir que estamos inventando, mutando hacia algo diferente. Y es ese estado, medio vertiginoso a ratos, es el que nos motiva a seguir imaginando y creando.

Esperamos que vengan otros siete años más y que seamos capaces de mutar y madurar.

A quienes fueron parte de esto, a los que confían en nosotros y a los que vendrán, un gran abrazo.