Diseño UI

¿Cómo la UX puede combatir la sobrecarga de información?

La sobrecarga de información es un problema que nos afecta a todos por igual. Dentro de los equipos de trabajo y también los usuarios externos, tienen una amplia gama de opciones para elegir dónde llevar a cabo sus tareas. Pero ¿Qué alternativa disponible es la mejor?

Antiguamente, actividades como llamar, jugar videojuegos, tomar una foto o navegar por Internet se debían realizar en dispositivos independientes entre sí. Sin embargo, con la llegada de los teléfonos inteligentes esto quedó sólo en nuestros recuerdos.

La aparición de los smartphones suponía una mejora en todo sentido, pero nadie imaginaba que la oferta de sus productos vencería con creces nuestra capacidad de captar toda esta información. Un ejemplo de esto son las aplicaciones para hacer ejercicio. Actualmente existen cientos de apps que cumplen el mismo rol, pero al momento de elegir, no podemos saber fácilmente cuál será la mejor opción. Aún leyendo comentarios de otros usuarios y evaluaciones. 

Aliviando nuestros malestares 

Un correcto diseño de interfaz puede ser la vía para que un producto destaque por encima de su competencia. Sin embargo, saber qué es un “diseño correcto” es una misión cada día más difícil, ya que al igual que en la industria de la moda, existen tendencias en Diseño UI que se contraponen. 

Por un lado, hay una mirada minimalista de los productos y servicios. Esta busca disminuir el cansancio de los usuarios a través de interfaces con pocos elementos donde destaque fácilmente lo más importante. Pero también existe un enfoque más personalizado, en donde un diseño llamativo puede marcar la diferencia entre realizar o no una acción. 

La fórmula pareciera estar en crear experiencias que nos parezcan familiares por sobre todo, aquellas que sean intuitivas y que no tengan sobrecarga de información. Esto nos hace recordar las tendencias de diseño esqueumórfico, donde los diseños tenían formas, bordes y sombras que los hacían más pegados a la realidad.

Sin embargo, una nueva tendencia, similar a esa, es el diseño 3D. Esta nueva tendencia, también apela al sentir el contacto con un elemento digital. Sin embargo, ¿Pueden este tipo de interfaces ser minimalistas, aún utilizando recursos que destacan algunos elementos por sobre otros?

Cantidad versus diseño

La sobrecarga de información en nuestras interfaces, es un problema que va más allá del tipo de botón que nos están presentando. Tiene que ver con la forma en que un diseño comunica, aquello que es más importante, sobre lo que no. Si no hay jerarquía, entonces esa tarea se traspasa a la persona, induciendo el cansancio.

El diseño plano o esqueumórfico, nos generarán la misma reacción, si no podemos ordenar visualmente lo que sucede en nuestra pantalla. Eso nos lleva a la nueva tendencia en diseño de interfaz: el reduccionismo. Y este reduccionismo está dado nada menos que por las interfaces de voz.

Tu voz para grandes tareas

Si tienes un televisor del último año, entonces entenderás el punto. Cada día, los comandos de voz adquieren más protagonismo en nuestros smartphones y aparatos tecnológicos, quitando botones y añadiendo los iconos de micrófonos.

El reduccionismo, nos invita a realizar las mismas acciones que siempre deseamos, utilizando la voz. De esta forma elimina las colección de opciones y posibilidades entre las que hay que elegir y lo resuelve a través de una única interacción: el botón de voz.

¿Crees que esta tendencia marcará el futuro? Probablemente, sea reemplazada rápidamente por otra. Aunque también puede instalarse en nuestra vida por décadas. Finalmente, quien determinará su permanencia son los usuarios. Con interfaces usables, accesibles y funcionales, será cada persona la que determinará el éxito o no de nuestros productos digitales.