Derechos fundamentales

El costo humanitario del e-commerce: La lucha sindical de Amazon en Estados Unidos

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El crecimiento de las compras online y el e-commerce durante la pandemia ha hecho que las exigencias para sus trabajadores aumenten, llevándolos a puntos límite. Así y desde el inicio de ésta, los ojos han estado puestos con especial énfasis en la multinacional de origen estadounidense Amazon, la que hoy se prepara para una votación histórica en pos de los derechos de sus trabajadores.

Carro de compras con el logo de Amazon en su interior.

Desde el inicio de la crisis económica y sanitaria que ha traído a nivel mundial el Covid-19, el gigante de las ventas online, Amazon, registró cifras históricas que dejaron impresionadas hasta a las mejores apuestas de Wall Street. Según la multinacional, durante los nueve primeros meses del 2020 sus ventas incrementaron en un 69% logrando alcanzar un beneficio neto de 14.109 millones de dólares, en comparación con los 8.320 millones del mismo período durante el 2019. 

Con números como estos, el colapso psicológico y físico de sus trabajadores se veía venir. Así, cansados de las altas exigencias y demandas de la compañía, comenzó la historia de lo que sería el movimiento sindical. Esto, pone a Amazon en el eje de la discusión laboral del e-commerce. Además, quedan en jaque las garantías que muchas empresas ofrecen a empleados que se encuentran sobreexigidos en sus labores diarias. 

“Queremos nuestros derechos” 

Dentro del gris edificio que alberga una de las sedes de Estados Unidos de Amazon en Bessemer, Alabama, comenzaron a gestarse las primeras discusiones en torno a los derechos que las personas. Las cuales, cumplían sus labores dentro de la empresa y veían vulnerados las garantías que exigirían para poder lograr una mayor protección laboral. Así comenzó a gestarse el movimiento sindical por el cual hoy se está votando a favor o en contra. 

Su puntapié fue firme y a su vez relevante por el contenido y la naturaleza de la lucha: cerca del 80% de los empleados de la planta eran pertenecientes a minorías raciales o eran mujeres. Lo anterior, avivó el descontento de los trabajadores, en un prisma que iba más allá de lo laboral. 

Esto también es político 

Ahora bien, las cosas se ponen aún más interesantes si consideramos el rol que ha adoptado el gobierno del presidente de Estados Unidos, Joe Biden. 

En contexto del burbujeante ambiente político que se vive hoy en día en la gran potencia mundial, el mandatario dejó claro a través de su cuenta de Twitter que está a favor de las peticiones de los trabajadores de organizarse, así como de paso ha querido reforzar su rol como el presidente demócrata que prometió ser durante su campaña política. 

Desde su comunicado, Biden aseguró que:

“Estados Unidos no fue construido por Wall Street, sino que fue construido por la clase media, y fue a su vez la unión, la que construyó a esta última”.

Si bien, aún no se conocen los resultados que arrojarán las urnas, esto marca un precedente para la historia de Amazon. En tanto, existe un fuerte cuestionamiento sobre el actuar y el rol de los altos mandos de las empresas. Lo anterior, es una de las representaciones más claras de cómo muchas veces, las organizaciones dejan de lado algo tan esencial y que finalmente, le dan vida a estas mismas: sus trabajadores. 

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