Plataformas digitales

La lucha en contra de los trolls: Australia encabeza propuestas para controlarlos

Todo parece indicar que Australia podría ser uno de los primeros países en el mundo en estar en contra del actuar de los trolls en Internet. Lo anterior, está promovido por su primer ministro, Scott Morrisson, quien está introduciendo nuevas leyes de difamación que obligarían a las plataformas a revelar la identidad de estas personas.

¿Cómo obligar a las redes sociales y el resto de plataformas a entregar la información personal de estos usuarios? A través de una serie de multas, que buscan incentivar que esta situación no ocurra. 

Las medidas en contra de los trolls

Por esta razón, las diversas plataformas en la web deberán crear un sistema para administrar las quejas de las personas que sientan que son víctimas del actuar de difamación o ataques en su contra. 

Parte de la propuesta explica que se le pedirá a la persona que publicó el contenido dañino que lo elimine. Sin embargo, en caso que se niegue, o si la víctima desea tomar acciones legales, la plataforma podrá proceder a solicitar al autor permiso para revelar su información.

Pero y, ¿qué pasa si dicho troll se niega a revelar sus datos? Las leyes comenzarán a introducir órdenes de divulgación de información. Esto quiere decir que, las plataformas tendrán la capacidad de revelar la identidad del usuario sin su permiso.

Aunque, si por algún motivo la plataforma no llega a poder acceder a dicha información o se niega, también deberá hacerse responsable. Un ejemplo de esto podría ocurrir en Twitter, en donde usualmente siempre existen ataques a diversas cuentas; si se da esta situación y la red social no quiere entregar los datos o no puede acceder a ellos, deberá pagar una multa.

Ahora bien, si el troll en cuestión está en otro país, todo parece indicar que esto quedará en nada, ya que la ley es solo para Australia.

Una eterna lucha

Se espera que durante esta semana, se entregue un borrador de dicha ley, sin embargo, esta no sería discutida hasta el próximo año. Además, aún no está claro qué detalles específicos se les pedirá a las plataformas que recopilen y divulguen de los trolls. 

También, resulta preocupante que todavía no se sabe qué tan grave debería ser el caso de acoso a ataque para justificar la revelación de la identidad de alguien. Por esta razón, una propuesta de este tipo puede atentar gravemente en contra de la privacidad de las personas.