Diseño UX

Primeros pasos para el diseño de un Dashboard

Diseño 6 min. de lectura

El uso de dashboard se ha masificado explosivamente, ¿Cuál es la razón? Es la información que nos bombardea cada día, esa que está relacionada directamente con la Big Data y la digitalización de servicios.

En IDA hemos caminado por este terreno ajeno a lo que comúnmente acostumbramos a hacer. Sin embargo, mostraré algunos aspectos desde la vista del diseño para comenzar a estructurar visualmente un panel de control efectivo.

En otro artículo observamos cómo es la arquitectura de un dashboard, la que se divide en navegación y espacio de trabajo. Reflejando elemento fundamental para entender la forma en que socializamos actualmente, la modernización del marketing y la renovación digital de muchas entidades.

Todo esto nos empuja como profesionales de la tecnología a ponernos al corriente de las diferentes formas de visualizar la información a través de los dashboards o paneles del control. Pero, ¿Qué es un dashboard? y ¿Cuál es el papel que cumple el diseñador en él?

Nuestro rol como diseñadores en un dashboard

El rol del diseñador es, después del arquitecto de la información, fundamental para diseñar un dashboard. En ese sentido, somos responsables de que los datos a visualizar en el panel se proyecten de manera adecuada, de acuerdo con los tipos de usuario y sus necesidades.

También somos encargados de que las jerarquías visuales sean fielmente representadas; eliminar cualquier ambigüedad y complejidad innecesaria en la implementación de los estilos. Mantener una limpieza visual, la que ayude a guiar la vista de los usuarios hacia los elementos que le importan, sin que lo perturben accesorios innecesarios.

El profesional debe tener especial conocimiento en qué tipos de datos se representarán, si son cuantitativos y/o cualitativos. Teniendo este punto claro, las comparaciones, conclusiones y análisis de los datos se hacen con mayor velocidad y precisión.

Características claves de un buen dashboard

Entre las características podemos encontrar los elementos de la información y la representación que tienen. Así como los cambios que pueda tener el diseño a nivel de colores u otros. La consistencia también es importante en esta materia. Conoceremos los detalles:

Alcanza objetivos:

Ayuda a los usuarios en sus objetivos específicos desde la información que representa.

Cambios repentinos:

Suelen llamar la atención de los usuarios. Se puede mencionar el uso de movimientos o cambios de color. Sin embargo, es común que las notificaciones se muestren en la esquina superior derecha del dashboard, ya que la visión humana está sensibilizada para detectar movimiento desde la periferia del campo visual.

Los cambios repentinos dashboard

Información en menor espacio:

Se utiliza el espacio económicamente, evitando que se fugue la atención a otros puntos.

Estimular al usuario:

Buscar que la persona aprecie los significados subyacentes vinculados a los datos brutos. Estas representaciones no deben restar importancia a estos significados.

Utilizar una estrategia perceptual:

Es una forma en la que el usuario logra interpretar los datos.

Consistencia:

Hay que mantener una consistencia en la representación de datos en gráficos. Solo si el dato es el mismo en dos gráficos diferentes, se usa el mismo color o iconografía. De lo contrario, el simbología es diferente.

No a las lecturas de etiquetas:

Evita que el usuario realice esta acción para distinguir un módulo de otro. El diseño debe ser fácilmente detectados a primera vista.

Paneles distinguibles:

Lograr que los paneles sean diferentes entre sí. Por ejemplo, en el uso de diferentes gráficos: barras, circular, indicadores, entre otros.

La implicancia en el diseño de la memoria a corto plazo

Un dashboard debe ser capaz de albergar y mostrar de la manera más simple, una gran cantidad de información. Un dashboard exitoso es capaz de reducir la carga cognitiva para el usuario, ayudándolo a retener pequeños fragmentos de información útil para sacar conclusiones y analizar. En esta área es donde, como diseñadores, debemos ser cuidadosos con los tipos de representaciones de datos que mostramos a los usuarios, privilegiando el “look” por sobre la usabilidad del panel.

Es muy importante que esta información sea vista correctamente, ya que está limitada por la cognición humana que engloba la atención. Por esta razón, el estudio preliminar de los usuarios finales de un dashboard es muy importante para entregar una solución a medida que sea comprendida por estos.

En los ejemplos citados, a continuación, vemos dos ejemplos de una mala y buena práctica de visualización de información en dashboard:

 

A pesar de que desde el punto de vista del diseño es una bella representación, no es muy efectiva.  El usuario debe hacer dos interpretaciones en vez de una; la primera; ver cuál de los sistemas operativos tiene más vistas, y la segunda; hacer una interpretación después de ver que la franja azul es la que tiene la mayoría de vistas. Por eso, el usuario busca en la simbología a qué sistema operativo pertenece ese color, o en su defecto, mover el mouse sobre la barra para que indique el nombre.

 

En este caso, se reduce lo suficiente la carga cognitiva como para que el usuario no deba retener colores y luego relacionarlos con su significado. En una sola vista, estos datos se relacionan entre sí, lo que facilita la comparación otros elementos y su posterior análisis.

El aroma de la información

En relación con las labores del diseñador en el diseño de dashboard, es importante destacar este término: aroma de la información. Se refiere a la tendencia humana a centrarse en información que le es relevante y filtrar todo lo demás. Esta capacidad se reduce cuando los estilos gráficos son muy similares en todos los módulos.

Por esta razón como diseñadores debemos ser precavidos con la consistencia en un dashboard. Recordando que un dashboard puede funcionar bien a nivel visual y así, no entregar casi información y capacidad de análisis para el usuario.

En otro resultado vemos cómo se ha diseñado cada módulo de manera distinta para entregar diferentes tipos de información. Es acá donde el aroma de la información se percibe rápidamente.

 

Aprendimos que diseñar dashboard es una tarea ardua. Se trata de una actividad que vincula distintas áreas de la información, donde se necesita conocer cómo funciona el cerebro humano, entender la memoria a corto y largo plazo y cómo el diseño afecta estos funcionamientos.

En IDA creemos que para desarrollar un buen proyecto hay que tener un equipo en sintonía. Y es que para elaborar un dashboard es importante que las áreas de trabajo involucradas tengan la capacidad y disposición a aprender conceptos que comúnmente no se relacionan el diseño directamente, pero sí tiene grandes implicancias.

Acerca del Autor

Investigamos las tendencias en proyectos y estrategias digitales para complementarlas con nuestra experiencia en artículos informativos. Nuestro objetivo es aportar al desarrollo del área, discutiendo la efectividad de las tecnologías y técnicas aplicadas.

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