![](data:image/svg+xml;charset=utf-8,<svg height="470" width="655" xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" version="1.1"/>)
La arquitectura de la información es una disciplina en la que participan profesionales, con distintos perfiles, para llegar a una conclusión en común y crear una estructura que posibilite a los usuarios una navegación que los lleve a encontrar lo que buscan.
Un profesional de la bibliotecología, gracias a sus conocimientos sobre organización y presentación de datos, puede desempeñarse como un arquitecto eficiente de sitios web, ya que tal como señala Gloria Ponjuán: “constituyen el imprescindible puente entre los suministradores, los usuarios y las tecnologías de información”.
Su objetivo es aplicar sus conocimientos sobre información y tecnología con el propósito de obtener la información y su estructura adecuada, de la fuente adecuada, para el cliente indicado, en el momento oportuno y en la forma más propicia para su uso a un costo justificable.
Esta profesión, como muchas otras, se diversifica día a día, fruto de las transformaciones de la propia sociedad de información, siendo su desafío actual el abordar desde una nueva dimensión el problema de la información. Esto significa que es necesario entender las nuevas funciones que surgen, las nuevas necesidades de información y los nuevos modos de responder a estas necesidades, así como crear nuevos métodos y formas de trabajo.
Por medio de Internet y otros avances tecnológicos, los profesionales de la información evalúan, analizan, organizan, reelaboran y presentan la información de manera que tenga la máxima utilidad para sus destinatarios.
Un arquitecto de información, según Rosenfeld y Morville, debe lograr cuatro aspectos fundamentales en la Web:
- Aclarar la misión y visión para el sitio, balanceando la información con las necesidades de su audiencia.
- Determinar cuál será el contenido con el que dispondrá el sitio y su funcionalidad.
- Especificar cómo el usuario puede encontrar la información en el sitio, definir su organización, la navegación, el etiquetado y los sistemas de búsqueda.
- Desarrollar mapas de salida sobre cómo el sitio se acomodará al cambio y al crecimiento en el tiempo. Hacerlo escalable.
La persona que desempeña la función de arquitecto de información debe ser capaz de organizar la información con el fin de tomar decisiones y lograr la satisfacción de sus usuarios y de combinar sus conocimientos a partir de la interdisciplinariedad. Es precisamente, la bibliotecología una de las profesiones que posee estas habilidades y destrezas.
El profesional de la información o bibliotecario es indispensable en los procesos de selección, procesamiento, almacenamiento, búsqueda, recuperación, posicionamiento y diseminación de la información, ya que forman parte del antes, el durante y el después del diseño de un sitio web.